Los controladores de Santiago ajustan sus funciones para evitar que el cierre de esta torre, por falta de personal, afecte también a Vigo y Coruña
Los controladores lamentan que AENA se haya negado a publicar un NOTAM para que las compañías aéreas pudieran conocer las horas de cierre del aeropuerto, imposibilitándoles el realizar cambios en las programaciones de vuelos
USCA. NOTA DE PRENSA
La primera jornada de paros parciales entre los controladores aéreos de Santiago de Compostela, motivada por el cumplimiento del número máximo de horas que les marca la Ley promulgada por el Ministerio de Fomento, se ha desarrollado de manera intermitente gracias a la regulación de horas y funciones que se diseñaron para no afectar a la labor de aproximación a los aeródromos de Vigo, Coruña y a la ruta norte de Oporto.
Si durante la mañana la actividad en la torre de Santiago se caracterizó por la normalidad absoluta, al entrar en el turno de tarde sólo dos controladores fue necesario que éstos regularan su actividad de una forma especial.
El tercer controlador nombrado a servicio por AENA no pudo finalmente trabajar, ya que había alcanzado su tope de horas anuales, por lo que en una dependencia en la que habitualmente debería haber cuatro controladores más un supervisor, se quedaron al frente del tráfico aéreo sólo dos controladores.
En una primera franja, desde las 15:00 a las 16:10 horas, el aeropuerto funcionó con normalidad tanto en su tarea de aproximación a los aeropuertos gallegos, como en los aterrizajes y despegues en el propio Santiago.
De hecho, ese interés por evitar al máximo los problemas al ciudadano les llevó a los controladores a prolongar ese primer período de tarde hasta las 16:40 horas, con el fin de poder dar servicio a un avión en vuelo que tenía previsto su aterrizaje en ese tramo horario.
De las 16:40 hasta las 17:20 horas, la torre de Santiago permaneció cerrada y sólo se trabajó en la aproximación de Vigo y la Coruña, así como en la aproximación norte de Oporto.
De las 17:20 a las 18:30 horas se trabajó con normalidad, originándose el cierre de la torre entre las 18:30 a las 19:40 horas, quedando operativo el servicio de aproximación.
Al cierre de esta nota, estaba prevista que la jornada de tarde continuara con normalidad en el turno de 19:40 a 20:50 horas, pero adelantándose el cierre del mismo a las 20:20 horas con el fin de regular la prolongación que se realizó en el primer turno de la tarde, para facilitar el aterrizaje de un avión que venía en ruta.
De las 20:20 a las 22:00 horas la previsión es que el aeropuerto de Santiago esté cerrado, funcionando sólo el servicio de aproximación.
Ante la situación ocurrida en la jornada de este sábado, los controladores lamentan que AENA se haya negado a publicar un Notam (Notice to Airman), es decir, un aviso aeronáutico a las compañías aéreas, para notificar las horas de los cierres del aeropuerto, imposibilitando de esta manera que las compañías cambien o modifiquen sus programaciones de vuelos.
La previsión que manejan los controladores para la jornada de este domingo indica que podría haber en uno de los turnos del día un solo controlador con posibilidades de trabajar, ya que el resto de los nombrados habrían cumplido el tope de horas anuales permitidas por la legislación vigente.
